La asana mejor conocida como la Postura de la Ostra

1.- Introducción a la Postura de la Ostra

La postura de la ostra es una variante de Kurmasana, «La postura de la tortuga«. Su nombre en sánscrito es Hasta Pada Baddha Asana: HASTA (mano) PADA (pie) BADDHA (atado) ASANA (postura), es decir, postura de las manos y pie atados. Sin embargo, por los practicantes occidentales es mejor conocida como la Postura de la Ostra.

2.- Cómo hacer la postura de la ostra

2.1.- Que debes tener en cuenta antes de empezar

Esta es una postura de inclinarse hacia adelante, pero no es una variante de la Postura de la pinza sentada, Paschimottanasana.

En el caso de Paschimottanasana, uno de los propósitos es estirar la columna vertebral. Mientras que a través de la postura de la ostra, no estiramos la columna vertebral, sino que simplemente nos inclinamos hacia adelante y, por lo tanto, sus efectos son claramente diferentes de la postura de la garra.

2.2.- La posición de inicio

En primer lugar, siéntese en el suelo con las piernas estiradas hacia el frente. Coloque firmemente las plantas y doble las rodillas, de modo que la proyección de las piernas en el suelo forme un rombo.

2.3.- La primera etapa

Seguidamente, inserte sus brazos a través de este «rombo«, permitiéndoles deslizarse debajo de las rodillas para que las palmas queden en el lado exterior de las plantas.

Sobretodo, los codos tocan el suelo. La distancia entre el perineo y los talones depende de la constitución de cada persona.

2.4.- Etapa dos

Antes de entrar en esta asana, es aconsejable que nos aseguremos de que todos los músculos de las caderas y las piernas estén relajados. De este modo, los efectos de esta asana en las articulaciones y las piernas serán más poderosos.

En segundo lugar, inclínese en varios movimientos más pequeños, pero no todos a la vez. Acerque su cabeza al suelo con cada exhalación.

Para finalizar, en el caso de una ejecución perfecta de esta asana, la frente toca el suelo y los talones tocan la corona de la cabeza. Permanezca en esta posición el mayor tiempo posible, sin forzarse. Respire hondo y con calma.

3.- Kurmasana potencia Anahata Chakra

Usar el Yoga para abrir los Chakras es un método por el cual alcanzamos paz y armonía interior. Los Chakras son un elemento de nuestro cuerpo físico y energético, que debemos tener en cuenta si trabajamos nuestra espiritualidad y modulamos nuestra mente.

Este trabajo de activación lo veremos reflejado en una mejor sensación física y mental, y en una mejor actitud hacia nosotros mismos y hacia todo aquello que nos rodea.

“Anahata Chakra representa el centro de nuestro Ser. De este centro de poder donde se ubica el corazón, emana el sentimiento de Amor más puro y sincero, y es la puerta de acceso a Diós.”

Enmanuel Torras Mata

El cuarto Chakra es Anahata, asociado al color verde y al elemento Aire; es el Chakra intermedio entre los Chakras superiores e inferiores. En Anahata reside el corazón, y de este centro emanan los sentimientos más puros y sinceros de Amor ,sin forma ni límites. Su apertura nos abre a una experiencia elevada de nuestra propia vida, y nos impulsa a mantener una vida más espiritual.

4.- Enfoque

Enfocarse en percibir la actividad del centro de energía sutil Anahata Chakra, interiorización profunda.

Perciba el despertar y el aumento del amor divino en su interior. El cuerpo se convierte en una concha que sostiene en su interior, en silencio, la perla blanca pura del Ser inmortal, cuya presencia eterna percibimos ahora.

5.- Efectos de la postura de la ostra

Los efectos principales de esta asana se perciben principalmente en la columna vertebral y también en las articulaciones. En resumen, los efectos benediciosos son:

En primer lugar, la acción especial en la columna vertebral lleva a la relajación de las raíces nerviosas de la columna y tonifica todo el cuerpo. La presión del líquido espinal se modifica y, por lo tanto, esta influencia es beneficiosa.

Además, las articulaciones femorales son muy importantes. En general, las personas comienzan a pensar en estas articulaciones solo cuando hay dolores relacionados con ellas.

Cualquier disminución de la movilidad de las articulaciones genera sufrimiento. La postura de la ostra actúa sobre estas articulaciones, haciéndolas móviles y elásticas.

La postura de la ostra también hace que las rodillas enfrenten un esfuerzo nuevo e inusual; por lo tanto, la influencia de las rodillas es altamente beneficiosa. Esta asana es también una muy buena preparación para la postura del loto, Padmasana.