1.- La Virtud que encierra el Niyama Santosha
Santosha es el segundo Niyama descrito en los Yoga Sutras de Patanjali, y su significado más amplio es el de la Virtud, que se origina en la aceptación de cualquier circunstancia, y de la satisfacción que proviene de uno mismo y no del exterior. Santosha es tanto una actitud como un estado de profunda paz interior.
Necesitas aceptar con alegría las ofrendas que la vida te facilite en tu presente, sin malgastar energía rememorando el pasado o idealizando el futuro.
Santosha se podría interpretar como contentamiento, pero no es sino más bien el enfocarse en el presente y vivirlo intensamente. Significa abrirse hacia la experiencia continua, y la percepción clara de lo que es ahora: lo especial de cada momento.
Santosha es amar al mundo tal como es. El hecho de estar aquí y ahora revela el mayor éxtasis posible. Nada de lo que existe en este mundo debe cambiarse: lo que realmente debe cambiarse es tu actitud interna hacia todo lo que te rodea.
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2.- Los diferentes niveles del Niyama Santosha
Muchos textos yóguicos hablan de Santosha en como se manifiesta o como se puede practicar en diferentes niveles:
Paz Interior: una mente satisfecha en un estado de poca actividad, potencia múltiples virtudes como la compasión y el desapego.
Intención: poner la máxima intención y esfuerzo en nuestras acciones, y aceptar los resultados sin crearnos expectativas.
Revelación: Santosha se manifiesta en la apariencia de serenidad y satisfacción no enfocada en deseos innecesarios.
Aunque la mayor práctica es que a través del Niyama Santosha acepta el devenir en el baile de Shiva.
Santosha se relaciona con la ecuanimidad, ya que practicarla te permite aceptar cualquier circunstancia que se presente, sean positivas o negativas, por ejemplo el placer, el dolor, el éxito o el fracaso.
Santosha cobra fuerza en tu vida en forma de felicidad sin objeto, y en tú plena satisfacción.
2.1.- Los múltiples beneficios de este Niyama
Niyama Santosha acepta el devenir, ayuda al yogui a desarrollar una mejor relación consigo mismo. Aprender a aceptar y a estar contento con tu propia forma de ser, aunque a veces no te gustes mucho. Hacer que tu felicidad dependa de conseguir las metas que te propongas, o de cambiar esos aspectos de tí mismo que no funcionan.
Sentirás los beneficios de Santosha mediante la práctica de asanas, esforzándote en aceptarte, reconocer las limitaciones de tu cuerpo, trabajar por lo que necesitas no por lo que deseas… sin buscar la perfección.
3.- Cómo llevar Santosha a tu vida
Acepta todo lo que sucede con agradecimiento. Agradece a quien te brinda la oportunidad para conocerte mejor. Convivir y con todo emociones tanto positivas como negativas, sin dejar que te dominen, aceptándo los sentimientos que te puedan producir; de esa manera podemos transcender nuestra dualidad.
Con el Niyama Santosha podemos vivir la vida felices por lo que estamos sintiendo en cada momento. Experimentar todo tipo de momentos con una actitud que nos permita trascenderlos sin que altere nuestros sentimientos.